21/7/09

Las impresiones del Maestro

No es fácil torear un toro con complicaciones, y más difícil es hacerlo con dos. Así fue el lote que le correspondió a Luis Miguel Vázquez el pasado sábado, donde hacía el paseíllo en la plaza de toros de Ciudad Real. Y así es como lo vio el propio torero: "Estoy contento en líneas generales con mi actuación, teniendo en cuenta las dificultades de mi lote, que no fueron pocos". Aunque es consciente que falló con la espada y sabe que es "un problema en el que llevo tiempo trabajando". Ese trabajo que según el propio matador de toros espera "obtener resultados pronto".
El sábado los toros no le ayudaron a la hora de la suerte suprema, por eso falló.

Luis Miguel Vázquez está muy desilusionado y sobre todo decepcionado con el juego de los astados, ya que "no dejaron nada más que expresar las ganas y la entrega en una tarde, en la que como todas en la capital, tenía muchas más cosas que expresar en el ruedo". Cosas que los aficionados se quedaron con ganas de ver y que Luis Miguel Vázquez guarda en su frasco de las esencias para derramar esas fragancias con un toro que realmente le permita hacer su toreo. Ese toreo tan particular y de aroma exquisito que tiene el de Daimiel.

1 comentario:

UN CHUCHO dijo...

¡¡¡ ANIMO YA VERÁS COMO EN LA SOLANA TENEMOS MÁS SUERTE!!!

ESTO ES UNA CARRERA DE FONDO, EL QUE MÁS RESISTE, GANA.