Está claro que Luis Miguel Vázquez ha sido uno de los afectados por el tema Francisco Romero Leal. Los pagarés de tres de sus actuaciones no los ha cobrado aún. El propio torero ha ido hasta Madrid para poder cobrarlos en un futuro. Aún así, de todos es sabido, que el diestro daimieleño es un hombre de palabra. Y lo primero es cumplir con su cuadrilla, a pesar de que ello suponga pasar un mal invierno. La crisis afecta a todos los estamentos por igual. Vázquez ha querido dejar sus cuentas claras y pagarle a cada uno de los miembros de su cuadrilla, para satisfacción propia. Ya que los hombres se miden por la palabra que dan.
A ver si la temporada venidera comienza cuanto antes. De hecho hay una promesa de torear en el mes de enero. Ojalá que se haga efectiva y no se quede en agua de borrajas, como ha pasado con algún que otro festejo durante la presente temporada. Que los empresarios también sean hombres de palabra y cumplan con lo pactado.
Sentir el toreo pellizcando el alma
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Pocos son los privilegiados que pueden pellizcar el alma del aficionado,
ayer en Manzanares lo logró Juan Ortega en la alternativa cumbre de Carlos
Ar...
Hace 1 año
2 comentarios:
Si alguna vez puse uno o más comentarios a los post de Luis Miguel Vázquez (Como a los de cualquier otro blog) puedo decir que siempre fue hecho en un tono más bien informal,con el buen humor siempre por delante aunque jamás dejaran de ser sinceros.
En este momento lo hago con distinto estado de ánimo, con toda la seriedad que me impone la amargura de tan desagradable noticia. Tengo la triste presunción de conocer un poco de primera mano los asquerosos entresijos de este -- por otra parte bello y grandioso-- mundo del toro. Esa inmensa dimensión positiva que nos ofrece la grandiosidad que contiene el toreo se te viene brutalmente abajo ante cuadros como éste. Las cornadas en la plaza, por fuertes que sean, nada duelen y nada afectan a la fortaleza física y espiritual del torero, esto es bien sabido; pero este tipo de cornadas, tan traicioneras y tan viles, acaban por hundir a Dios y a su madre... (y perdón por esta expresión tan malhumorada...)
Qué quieres que te diga, Luismi... Sabes que estoy contigo -- y con todos los toreros que no tienen el privilegio de ser figuras -- porque sé de sobra lo que es esto.
Recibe un a brazo de tu amigo Félix Rodríguez Castro (Félix padre).
Te lo envio como anónimo porque no me admite la fórmula que yo conozco
Una verdadera lástima que "personajes" como este francisco anden por el mundo. A ver ahora quien da la cara, porque,lo que está claro es que al final no cobra el de siempre, el torero(el que no es figura claro), ¿es que acaso no se juega la vida igual ó más que las figuritas? ¿que va ha hacer la asociación de toreros? ¿Podemos permitir que esto ocurra?.
Un abrazo y ánimo.
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