En la tarde de hoy ha quedado presentado el cartel oficial de la encerrona de Luis Miguel Vázquez en Torralba de Calatrava. Será el próximo 23 de abril cuando se encierre con seis astados de la ganadería de José Luis Marca. Un gesto torero y altruista como se ha dicho en varias ocasiones a lo largo de la presentación.
Es la primera vez en la historia de la plaza de toros de Torralba de Calatrava que se celebra un festejo de tal magnitud. Un hecho que marcará una página de la historia de este coso, y que todos recordarán con el paso de los años, por el simple hecho que Luis Miguel Vázquez eligiera dicho coso para encerrarse con seis toros y donar generosamente los beneficios a la Asociación Española Contra el Cáncer.
Como bien ha dicho el diestro durante la presentación del acto "el fin para lo que se destinan los beneficios económicos de este festejo, ya es suficiente motivo para que yo desinteresadamente me vuelque en él".
Pero no sólo se debe volcar el torero, el ayuntamiento de Torralba y Daimiel junto con el empresario y los miembros de la peña 'Tomás Santa Cruz', no. Todo el mundo que asista al festejo y los que no puedan deben hacerlo, puesto que la causa lo merece.
Como deseo expreso del torero declaró que: "me encantaría ver la plaza llena de público para colaborar con tan noble causa, quien más y quien menos sabe lo que es ayudar en la lucha contra el cáncer. Enfermedad que está cada vez más controlada pero de la que nadie estamos exentos". Y razón tiene el matador de toros, por ello es importante colaborar, y aportar nuestro granito de arena. Luis Miguel Vázquez va a poner toda la carne en el asador. Sabe de la responsabilidad que ello conlleva, pero la asume con valentía, puesto que para él la plaza de Torralba es "especial y entrañable". Ya que en ella se han contado "algunos pasajes más importantes de mi carrera profesional. Y la comunión entre la plaza y Luis Miguel Vázquez es ya un hecho inolvidable, en mi trayectoria profesional". Todo ello porque siempre se ha sentido "arropado y protegido". Eso lo notan los toreros que tienen un poco de sensibilidad, y Luis Miguel Vázquez es de esa clase de torero. No sólo se ha sentido arropado y protegido sino que también lo han valorado y querido, dos cualidades muy importantes para un torero.
Más importante aún, si cabe, es ver la plaza llena con todos los aficionados de la tierra, como ha pedido Luis Miguel Vázquez, que el público llene la plaza y sea generoso. Que disfruten con su toreo y de una tarde inolvidable.
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